martes, 17 de marzo de 2015

Hoy el Jazz es Blues


Aparte de azul, la palabra inglesa "Blue" tiene en este idioma la connotación de tristeza y melancolía. "To be blue" es estar triste. Hoy por ello el Jazz se contagia de Blues por el fallecimiento de Juan Claudio Cifuentes, la gran voz del Jazz en la radio.


Nacido en 1941, en París hijo de españoles exiliados, conoció esta maravillosa música en la ciudad luz.Ya en Madrid comenzó su andadura en el fanzine Aria Jazz. Posteriormente fue la radio su casa, primero la FM de Radio Popular, más tarde la Onda Dos de Radio España y Antena 3. Con Radio Popular reconvertida en COPE retornó a su FM, reconvertida a su vez en Cadena 100. Desde 1988 eran los oyentes (escuchantes, que diría Pepa) de Radio Clásica los que disfrutaban del buen hacer y el mucho saber de Cifu.

Y luego estuvo la televisión. Desde 1984 hasta 1991 aquel "Jazz entre amigos" que popularizó, en el sentido más noble del término, el Jazz entre quienes poco conocíamos de esta música.


Hoy puedo decir, con todo el cariño del mundo, que Cifu me enseñó a amar el Jazz. El mejor homenaje que podemos hacerle es bajarnos los podcast de su programa en RNE. Y disfrutar de ellos como él estará ahora disfrutando de una jam session con Tete Montoliú, Miles Davis y John Coltrane. Se le había concedido la medalla de oro de las Bellas Artes, la cual, como otros grandes de la cultura, tenía previsto no ir a recoger por disconformidad con la política de Wert. ¡Olé tus nalgas!


lunes, 13 de octubre de 2014

En los genes lo llevaban


Hace unos cuantos años me encontraba sin empleo, Era octubre, mi anterior contrato había finalizado en agosto y por entonces se tardaba entre tres y cuatro meses en recibir la primera prestación del paro.  Andando con mi currículum bajo el brazo por emisoras, estudios de grabación y productoras recalé en una emisora local donde la persona que me recibió me presentó al director de la casa. Sorprendentemente me comentó que para técnico sí que había previsto cubrir una vacante y nos citamos para una entrevista la semana siguiente.

Efectivamente les interesaba contar con un técnico y mis tres años de experiencia en otra emisora local les interesó. El director me contó las tres maneras que había de ganar dinero en aquella emisora. Por un lado estaba el sueldo, por otro la realización de cuñas, cuyo coste, pagado por el anunciante, se repartía  a partes iguales entre el locutor y el técnico que la grababa, la tercera vía era la realización de unos programas patrocinados. Si la cosa se daba bien podía salir un sueldo bastante majo para la época, incluso sólo con que grabase la misma publicidad que en mi anterior emisora.

Tres maneras de ganar dinero, de las cuales no vi la realización práctica de ninguna. El contrato no se firmaba y las excusas para no hacerlo se sucedían a cual más surrealista y chiflada, alternándose con promesas de una inminente firma, no grabé ni una sola cuña, salvo autopromociones y una que ¡que curioso! no se cobraba porque era una "gentileza de la emisora con el cliente". Gentileza que podía haberla tenido el director de la radio; quien grababa bastante publicidad en autocontrol para llevarse la pasta del técnico y del locutor y añadirla a un sueldo que desde luego no era nada pequeño.


Hablando con compañeros me doy cuenta de que de los ocho redactores y redactoras, los tres locutores y los dos técnicos sólo dos están cobrando a fin de mes. Para más inri la emisora no sólo tiene una enorme cantidad de publicidad (algunos cortes en los programas llegaban a tener doce cuñas) por la cual el propietario de cualquier otra emisora local no sólo hubiera matado, sino cometido un genocidio; sino que en dos ocasiones el director de la emisora se vanaglorió ante la impagada plantilla de que se había batido el record de facturación publicitaria. Así obtiene beneficios hasta Abundio.

En eso llegó la comunicación del INEM de que a partir de ese mes comenzaría a cobrar mi prestación por desempleo durante veinte meses. Evidentemente me marché. Estaba claro que no les daba la gana hacer un contrato por lo que yo, que estudié imagen y sonido para aprender un medio de vida y no un hobby, allí sobraba. Hubo algún compañero que me intentó convencer para seguir argumentando que a mi casa no me iban a llevar nada, y que en aquella casa adquiriría experiencia y conocimientos. Yo le contesté que ya tenía tres años de experiencia y una titulación oficial y que el hecho de cobrar el paro y trabajar era tan ilegal como no hacer contrato ni pagar a los trabajadores; y desde luego yo no iba a ser un delincuente como aquella emisora... ¿que no he dicho como se llamaba? ¡ah, perdón!. Era Radio Getafe, de la cadena RATO. ¿Les suena el nombre? ¡Como no les va a sonar si el propietario era el hermano de un tal Rodrigo que presidió un banco cuyo color era el mismo verde que el de la emisora! Si, la cadena RATO obtenía beneficios no sólo por el medio legítimo de su facturación publicitaria sino también por el ilegítimo de robar a sus trabajadores. Y es que de la misma manera que han existido sagas y dinastías de actores (los Gutierrez Caba), de pintores (los Madrazo) de músicos (los Strauss) de escritores (los Dumas) o payasos (los Aragón) también tenemos a familias en cuyos genes está firmemente implantado el meter el dos de bastos para sacar el as de oros, que escribía Don Francisco de Quevedo y Villegas.

 


 

domingo, 12 de octubre de 2014

ADV: Si te hubiese tenido entonces....

Me acabo de encontrar con un sitio web llamado www.ascodevida.com aparte de que para mí la vida, lejos de ser un asco, tiene sus cosas buenas y sus cosas malas; la web está divertida. Se trata de que cualquiera puede publicar anécdotas y sucedidos que le hayan amargado o arruinado el día. Tienen una web hermana llamada www.teniaquedecirlo.com donde también cualquiera puede publicar cualquier mensaje, positivo, negativo, crítico, irónico, o de cualquier índole que quiera dedicarle a alguien, ya sea una persona concreta, un famoso, o una generalidad de destinatarios.

El caso es que ambos sitios están ordenados por apartados, y uno de ellos es el correspondiente al trabajo. En el caso de ADV ("ascodevida") y leyendo los mensajes no puedo menos que imaginarme si en ciertos momentos de mi vida hubiese tenido un foro como este para expresarme. Tal vez los mensajes hubiesen sido estos:

Acabo de volver de unas oposiciones para TVE celebradas en Pamplona. Nos hemos encontrado todos los alumnos que acabamos de finalizar nuestros estudios en el Instituto Oficial de RTVE, más de 200 personas. Sólo dos han conseguido superar el primer ejercicio. ADV

Esta semana RadioCadena Española, perteneciente al ente público RTVE, ha convocado unas pruebas para locutores. La titulación que piden es de BUP pero no FP. Con lo que no podemos presentarnos los alumnos del Instituto Oficial de RTVE, que para más inri todos los años realizamos un Maratón de Radio que emite RadioCadena Española.ADV

Una amiga periodista suele despotricar contra los que sin haber estudiado periodismo hacemos labores de locución y presentación en emisoras de radio y televisión porque "rompemos el mercado al trabajar por cuatro perras". Hoy me he enterado que esta amiga está realizando prácticas en una radio sin cobrar un puto duro. ADV

Tras haber debutado hace dos meses en la radio con mi primer contrato profesional, me entero que el convenio de la limpieza establece un salario igual que el mío. ADV

El director de la emisora donde trabajo se ha autocongratulado delante de todo el personal y por segundo mes consecutivo de haber batido el record de facturación publicitaria. De 12 periodistas y 3 técnicos sólo dos cobran a fin de mes. ADV

Soy cámara en un canal de televisión. La semana pasada pidieron voluntarios para disfrazarse de Papá Noel para las promos navideñas, a lo cual me apunté. Hoy nos han comunicado al 90 por ciento de la plantilla la finalización de nuestros contratos. ADV

Encontré trabajo en una emisora de radio local. A los dos dias se presentó un inspector de Iberdrola con dos números de la Guardia Civil para descubrir que la luz estaba enganchada ilegalmente. El director y propietario está desde entonces en paradero desconocido. Menos mal que no llegué a firmar el contrato y por lo menos podré cobrar el paro. ADV

Hoy, 24 de diciembre, 25 personas de una televisión local nos vamos a la calle porque se nos acaba el contrato. La empresa ha tenido, eso sí, los santos huevos de darnos un cóctel navideño. ADV

Me han ofertado trabajar en una emisora de radio municipal, por la cara porque "el ayuntamiento lamentablemente no puede pagarme un sueldo" En las fiestas patronales actuan Pepe Carroll, Chenoa y Mago de Oz, para su cachet si que hay viruta. ADV

Y aquí viene el último...
 
Me llaman de una emisora donde hace años dejé mi currículum, en el cual constan más de siete años de experiencia profesional. No sabía si descojonarme o cagarme en sus muelas. El ADV ha sido para ellos ya que yo tengo hoy en día un empleo del que no me puedo quejar.



miércoles, 1 de octubre de 2014

Ya iba siendo hora.

Leo en la web www.prnoticias.com que el Ministerio de Trabajo ha realizado una inspección en la Cadena SER, donde ha descubierto a 20 becarios realizando labores de personal de plantilla cobrando como estudiantes y sin contrato ni seguridad social. Informa el mismo medio que esta campaña del Ministerio lleva ya un año y que el diario El País (multa de 160.000 euros por explotar a unos periodistas que encima habían pagado una pasta gansa por hacer un Master de Periodismo), El Mundo y la Agencia EFE han recibido ya la visita de los inspectores.

No puedo menos que alegrarme de que, por fín, las autoridades laborales hayan decidido coger el toro por los cuernos y empezar a corregir el desmadre reinante en esta profesión donde algo tan normal como un contrato de trabajo es un auténtico lujo. No de ser curioso (hipócrita, mas bien) que medios donde se denuncia la corrupción política y empresarial utilicen este tipo de fraudes; que supone una estafa a los trabajadores pero también a la Seguridad Social y a la Hacienda Pública.


Tras celebrar la noticia me asaltan, sin embargo, una serie de dudas. La primera es que se ha inspeccionado a medios propiedad del grupo PRISA, opuesto como todo el mundo sabe al actual gobierno del PP. También se ha visitado El Mundo, que a pesar de comulgar con la ideología neoliberal ha marcado sus distancias con el poder político en varias ocasiones. Me pregunto si los inspectores visitarán también los medios que habitualmente palmean y jalean al actual partido en el poder. ¿Llamaran los inspectores de trabajo a las puertas de la COPE, La Razón, Libertad Digital, ABC o Intereconomía? y en el caso, espero cierto, de que lo hagan ¿lo harán por sorpresa o habrá algún "garganta profunda" que avise con tiempo para poder "dar el día libre" a becarios, colaboradores y gente en prácticas?

La otra cuestión que me preocupa es si todo se quedará en los medios nacionales y algún que otro autonómico. Si esto sucede quedaría impune este robo precisamente allá donde más se comete: en la prensa, radio y television local. Allí no es que se pague a los trabajadores como becarios, allí simplemente es que no se pagan. Las becas son sustituidas por "prácticas" o por "periodos de prueba" donde lo único que se prueba es la paciencia del currito de turno. Por no hablar de los cursos y talleres de radio que al final lo que hacen es poner a los chicos y las chicas de la localidad a trabajar como mano de obra gratuita. Conozco personalmente el caso de emisoras locales con más del ochenta por ciento de la plantilla no recibe ningún tipo de salario a pesar de que sus beneficios publicitarios no dejan de crecer. Conozco también ayuntamientos con emisoras municipales donde el gasto en sueldos es parejo al de Tarzán en corbatas y que sin embargo no escatiman en gastos de hermanamiento (donde ni se duerme en pensiones, ni se viaja en turista, ni se come en fondas precisamente) ni en contratar a las máximas figuras de la farándula para actuar en las fiestas patronales.


Aplaudo la campaña de inspecciones de trabajo siempre que sea para todos, rojos y azules, grandes y pequeños, comerciales y municipales. Como se titulaba un gran programa de TV desaparecido, caiga quien caiga.   

miércoles, 10 de septiembre de 2014

¿Cultura del esfuerzo?

Uno de los momentos mas cabreantes de mi vida profesional fue cuando me dirigí a cierta emisora de radio, convenientemente pertrechado de un currículum en el que constaban más de seis años de profesiona, para ofertar mis servicios tanto como técnico como para ponerme al micro. En la radio me soltaron la milonga que tantas veces hemos escuchado: que si estamos empezando y no hay ingresos por lo que no podemos pagar a la gente (intente el lector tomar un taxi y no pagar utilizando semejante argumento y ya me contará donde acaba) que si prácticas, que si un periodo de prueba....

Un par de días después leía asombrado y cabreado en un 30% de lo primero y un 70% de lo segundo que una tal Ania Iglesias había sido fichada por la misma emisora que me pedía el sudor de mi frente sin a cambio ganarme el pan. La Iglesias no había trabajado nunca en prensa ni radio, jamás fue alumna de periodismo, imagen y sonido o comunicación audiovisual. El único mérito de Ania era haber sido finalista de un concurso televisivo llamado "Gran Hermano".


Hoy me encuentro con dos noticias que figuran en diferentes secciones de prensa y que, aparentemente, nada tienen que ver. Por un lado un informe de la OCDE titulado "Panorama de la educación 2014" señala que mientras que el paro entre los titulados superiores supone un 5%, en esta Ejpaña de nuestros amores llega al 14%, cási el triple. Por otro lado la "cadena amiga" Telecinco pagará la nada austera cantidad de 7.200 euros al mes a una tal Chabelita, cuyo único mérito profesional es ser hija de Isabel Pantoja, como colaboradora que dará consejos de belleza (lo cual viendo las pintas de la niña de tan pijohortera nombre es como si King África impartiese clases de aerobic y fitness) en un programa magazine.

Estas dos noticias comparadas nos dan una radiografía de la profesión, a falta de un justo y necesario libro blanco de la misma, bastante elocuente. Una choni que según ella misma reconoce no tiene ni idea de moda ni de belleza, todo un axioma, añado; va a cobrar una pasta al mes que a buen seguro los realizadores, camarógrafos, redactores, maquilladores, productores, técnicos de sonido o diseñadores gráficos de la misma cadena no huelen en un año. Señores Montoro y Guindos ¿quién es el que está gastando por encima de sus posibilidades?

Tal vez no haya que ser periodista para presentar un programa que no sea especificamente informativo. Pero hay que ser algo, se puede ser licenciado en educación física para presentar un programa de deportes, se puede ser filólogo para hablar de literatura, se puede ser maestro para hacer un infantil, se puede haber recibido una formación específica como locutor o presentador (que conste que siempre me estoy refiriendo tanto a hombres como a mujeres) y por supuesto se puede hablar de moda siendo profesional de la misma. Pero dudo mucho que la ínclita Chabelita pueda diferenciar una sisa de un canesú.

Así funciona esta profesión. Mientras que muchísimos titulados en periodismo y comunicación o técnicos especialistas o superiores de imagen y sonido no encuentran otra alternativa al paro que la caja de un hipermercado, la barra de un burguer, la cadena de montaje o las baldas de un almacén. A los hijos de los famosos se les ofrecen oportunidades que se les niegan al resto de los mortales.

Y luego escucharemos al politicastro tuercebotas de turno quejarse de los niveles de educación o clamar por una cultura del esfuerzo. Y echaremos sapos y culebras cuando este mismo politicastro, o el dirigente empresarial negrero también de turno clame por rebajar aún más los salarios y hacer contratos basura para integrar a los jóvenes sin formación. Pero no escucharemos a ninguno de los dos criticar estos sueldazos de escándalo que son una auténtica pedrada a esa austeridad y a esa cultura del esfuerzo que tanto pregonan.

Si algún partido político incluye en su programa una reforma del famoseo; tiene todas las papeletas para llevarse mi voto.






miércoles, 13 de agosto de 2014

Hasta siempre, Robin y Lauren

Parece un tópico; pero otra vez son dos los grandes que nos dejan prácticamente a la vez. La Gran Dama del cine Lauren Bacall nos ha dejado cuando aún no nos habíamos repuesto de la despedida de Robin Williams del reino de los vivos.

Dos personalidades muy diferentes, pero dos grandes de la pantalla. La Bacall supo envejecer con dignidad, como un buen vino, llegando incluso a rodar en 2012 el filme "The Walker" que fue presentado en el festival de cine de Berlin. Otro festival europeo, el de San Sebastián, le otorgó el premio Donostia que la gran actriz agradeció en español ante el auditorio del Kursaal.

Permitidme que me detenga sólo un poco más en Robin Williams, no sólo por haber visto más películas suyas, sino porque interpretó una sobre la radio. Me refiero a Good Morning Vietnam, de Barry Levinson





Para siempre, entre otros muchos personajes, nos quedará aquel divertido Adrian Cronauer que con sus sarcásticos comentarios y su música intentaba hacer más llevadera la existencia de aquellos muchachos luchando en una absurda guerra. No sólo recomiendo su visionado sino también la escucha de su banda sonora con temas de James Browin, Beach Boys, Wilson Pickett o Martha Reeves & The Vandellas entre otros; sin olvidar, por supuesto, el "What a wonderful world" de Louis Armstrong que apareció como sencillo del álbum de la película. Por entonces yo también era locutor de radio y pinché bastantes veces aquel difícil tema, pues su cortísima introducción instrumental impedía clavarlo por lo que había o que presentarlo en vacío o pisando el tema precedente.

Descansa en paz Lauren, descansa en paz Robin.

viernes, 25 de julio de 2014

Intereconomía.

El cierre de una empresa siempre es una desgracia. El de un medio de comunicación alcanza el grado de tragedia habida cuenta de los altísimos índices de paro en el periodismo y en el audiovisual. Salvo algún caso excepcional, como pueda ser un canal de videncia o de teletimos, jamás me ha hecho la menor gracia que haya compañeros que pasen a engrosar las listas del paro.
Es evidente, pues, que tampoco deseo ni aplaudo la situación por la que está pasando Interconomía y que ya lleva un par de EREs sin que el futuro de este canal ultraliberal y ultraconservador (curioso como dos conceptos antagónicos en el siglo XIX hoy van de la mano) termine de aclararse. Pero también he de confesar que no siento la menor simpatía ni aprecio por Intereconomía. Comprendo y apoyo que en una sociedad libre y democrática existan medios de comunicación de todas las opiniones, filosofías y tendencias siempre que no promuevan ni apoyen actividades delictivas. Pero también apoyo, valoro y busco la objetividad, la ecuanimidad y la coherencia y con esto Intereconomía no tiene nada que ver.

Intereconomía carece por completo de objetividad. Para este canal todo lo público es un desastre, una ruina y un despilfarro mientras que todo lo privado es eficiente, eficaz y maravilloso. Para este canal los sindicatos son una panda de vagos, sangijuelas y vividores mientras que la patronal es un club de abnegados emprendedores que con su trabajo y esfuerzo levantan el país. Para Intereconomía Zapatero es los culpables de la crisis, de la prima de riesgo, del desempleo, del hundimiento del Titanic y de la muerte de Manolete mientras que Rajoy es para ellos el gran líder que no sin esfuerzo acabará con el paro, saneará la economía, conseguirá la devolución de Gibraltar y que el primer astronauta que pise Marte clave en su superficie la bandera rojigualda. Para Intereconomía los manifestantes son una panda de perroflautas manipulados por la izquierda que cuestionan la legitimidad de la soberanía popular expresada en las elecciones; salvo que los que se manifiesten lo hagan en contra del aborto o a favor de la familia en cuyo caso se trata de la legítima respuesta en la calle del pueblo español.  Según Intereconomía nuestros astronómicos sueldos deben bajar para que España sea competitiva (no dicen con quién hay que competir, aunque todo apunta a China, Bangladesh o Camboya) y los deshacucios son el justo castigo que sufren aquellos que se han atrevido a vivir por encima de sus posibilidades.
Parece simplista esta filosofía, y lo es, pero es la que aplica este canal. Intereconomía tiene como definición ideológica ser de derechas, y de hecho afirman estar orgullosos de serlo. Por supuesto son un medio patriótico españolista y también se definen como católicos. Aunque Intereconomía, identifica maniqueamente derechas y catolicismo e ignora sistemáticamente a colectivos católicos de caracter progresista como el SAIN, la HOAC o la Juventud Obrera Cristiana. Ni que decir tiene que en esta casa se hace caso omiso de la Doctrina Social de la Iglesia.  
Intereconomía no es católica, es farisea. No merece ser llamado de otra manera un medio que se da contínuamente golpes de pecho por el elevado desempleo y al que no se le cae el nombre de España de la boca pero que sin embargo emite un spot en el que por sus buenas infraestructuras y sus preparados profesionales se animaba a los empresarios a invertir en Marruecos.  O que no cesa de repetir lo de que " hemos estado viviendo por encima de nuestras posibilidades" mientras que anuncian vehículos de alta gama con los que los desempleados podran recorrer mundo buscando trabajo; o urbanizaciones de lujo con campo de golf donde seguro que los deshauciados hallarán un techo bajo el que cobijarse.

Hoy Intereconomía ha dejado de emitir para toda España. Conserva sus licencias de emisión en las comunidades madrileña y valenciana, curiosamente allí donde la trama Gürtel, "ignorada" por la propia Intereconomía ha campeado por sus anchas. En el resto del estado hay buscarla en plataformas. No parece incoherente, en cualquier caso, que un medio que ha defendido una educación y una sanidad privadas al alcance de quien pueda pagárselas de pago haya que pagar por verlo. Estoy seguro de que los banqueros, especuladores, brokers y consejeros de grandes multinacionales a los que Intereconomía no ha dejado de jalear y palmear se abonarán a ese televisión que no ha dejado de bailarles el agua.